miércoles, octubre 14, 2009

Him Rivera - Nuevas Pinturas






Horizonte Disponible

Por Ignacio Barrientos F.

El espacio del cuadro es un terreno común de exploración, desde esa experiencia puedo dar cuenta de la obra de otro artista.

Un joven pintor lo mancha todo, es lo que “debe” hacer, experimentar con todos los recursos disponibles. De a poco se hace la claridad en el caos. “Me dirijo a la claridad” decía Rothko.

Him Rivera ha pasado por todo esto. A través de los años ha hecho surrealismo, expresionismo abstracto, arte objetual, collage, esculturas, y también se ha hecho parte de una tradición que “llegó del futuro” a Chile a principio de los noventa, me refiero a la pintura de líneas.

Hay cuestiones que por economía de medios debemos asumir, Him también redujo la escala de sus obras. Así ha llegado al formato de esta exposición.

Pintado-despintado-pintado, desmaterialización del color, espacio vacío (influencia oriental). En estos cuadros parece que hubiese trabajado con fotografías y que las hubiese raspado, limpiado, repintado. Eso parece, aunque tal cosa no ocurrió directamente. Sí lo hizo en otro momento y de algún modo se ha traspasado a estas obras.

En cuanto al tema, el formato te dice que se trata de paisajes y las imágenes al acercarte lo confirman. En esta ciudad, en esta región no hay que ir lejos, todo tiene que ver con eso. Ahí está el agua y la línea del horizonte: la ciudad , los árboles y los seres flotan sobre esa “línea maestra”.

Tuve ocasión de contemplar la obra de Zobel,un español-filipino. Estas pinturas me lo recuerdan, eso sí en una versión más libre. Him retoma el paisaje donde Zobel lo ha dejado.
En estas pinturas aparece lo gestual, pero ese gesto surge dentro de una concepción previa del espacio y el vacío. Ocurre en todas las obras pero sólo en el cuadro de mayor formato de la sala se hace evidente.

El cuenta kilómetros de la nave espacial del pintor sorprendería al público, si supiese las horas y la distancia que ha recorrido el artista para llegar hasta aquí.
El formato no es espectacular, el lugar cotidiano: Un Café central de provincia. Un público quizás educado pero no especialista en temas de arte. Nadie se hace muy famoso aquí, pero siempre es un acierto encontrar arte de buena factura a la vuelta de la esquina.